El Domingo charlamos hasta las 4 y pico de la mañana..., y hoy, te dormiste todo amor..., fue feriado en USA, el MEMORIAL DAY, no trabajaste y agarraste la cama y la gastaste!!!...apenas si nos mandamos un par de horas y pico, de las 10 de la noche a las 12 y 30...y como mañana madrugas para ir a trabajar, la cortamos por ahí..., así que en estos momentos dormis...
Estuve trabajando un rato, y recordando algo de nosotros..., es que el 3 de junio se cumplen 2 años exactos de aquella vez en San Pablo, Brasil..., te acordás???...yo lo repaso y lo repaso y solo recuerdo nítidamente tú mirada...la tengo fija, creo que nunca voy a olvidarla...y de eso, más o menos se trata la historia que voy a contarte...
Siendo un niño, una de mis dos abuelas siempre nos decía: ¨los ojos son el espejo del alma...¨, creo que por aquellos años, esa frase quedaba en algún cajón de mi memoria..., era una más..., como tantas que dicen las abuelos y la gente mayor...Después, durante mi vida, la fui sintiendo infinidad de veces y nunca pude entenderla o tan siquiera darle la importancia que aparentemente esa frase tiene...Fuí conociendo ojos y miradas, más lindos, más feos, más cristalinos, más mentirosos...que se yo...de todo un poco..., pero jamás, pude darle a aquella frase de mi abuela, la importancia o la categoría que ella le imponía cuando me la decía...Seguía siendo una frase hecha más...Y pensaba, y supongo que hasta el día de hoy sigo creyendo, que es imposible tan solo con mirar a los ojos, saber si alguien miente o dice la verdad, si alguien quiere de verdad o no...Cuando los sentimientos te dominan, todo se ve lindo y hermoso...
Pero un día, mientras andaba por algún lugar del mundo bastante lejano y compartía toda una ciudad con un montón de gente de otros países...recibí una pequeña lección...casualmente, de otra abuela..., me enseño a comprar pescado!!!!
Te reís verdad???...pero es en serio. Era una mañana de mucho frió...había nevado toda la noche y ya habián limpiado las calles..., la nieve se amontonaba sobre los cordones de la vereda y se iba ensuciando minuto a minuto...ya era díficil encontrar ese blanco increíblemente blanco...era gris y negra...Había trabajado toda la noche en el taxi..., tenía buena plata en el bolsillo y no se porque se me ocurrió que podía llevar para casa bacalao..., me dió por ahí...nunca en mi vida lo había hecho...jamás había cocinado bacalao, pero, como en aquella ciudad del norte, residián muchos españoles también del Norte de España y muchisimos portugueses..., abundaban las pescaderías, y la oferta era tremendamente variada...Entre y vi pescados que jamás había visto en mi vida...y sabes algo?, erán horribles...todos...ni uno lindo...y no se si me asuste o realmente la falta de cultura en lo que se refiere a frutos del mar, se me noto enseguida...que apenas cuando me toco el turno, me anime a pedir una merluza para hacer al horno...ja ja...Hablame de vacas y carne pero no de peces amor...que horrible!!!!...Me fuí con mi merluza, no muy convencido y pensando como carajo iba a cocinarla..., la primera idea fue al horno, con bastante ajo y perejil, alguna cebollita, morrón, sal y pimienta y papas al horno, bien doraditas...y listo...
Cuando subía al auto, después de haber tirado a mi amiga la merluza sobre la butaca del acompañante para llevarla gratis hasta casa..., se me acerco una señora, de unos 60 años, alguno más o alguno menos...y me pregunto con un acento claramente portugues si estaba trabajando...Le dije que si..., nadie me esperaba en casa y mi amiga la merluza supongo que no tenía ningún apuro en llegar..., así que, un viajecito más no venía mal y además, el pescadito me iba a salir casí gratis...
Arrancamos los tres..., era un viaje de unos 15 o 20 minutos...y comenzamos a conversar...Mi pasajera rompió el hielo y me dijo: así que hoy vamos a comer pescado no?...si claro, hace frió, nevo toda la noche y yo tengo unas ganas enormes de llegar, darme una ducha, comer y acostarme tranquilo en mi casa...Qué compro? bacalao?...Me reí y le conte a mi nueva amiga la historia...y que apenas si me llevaba una merluza...Esa mujer, me miró y me dijo, le voy a dar dos consejos para cuando vaya a comprar pescado, lo primero es el olor...debe oler a mar, sino le siente el olor a mar, no lo compre...y lo segundo y más importante todavía es que debe mirarlo a los ojos...los ojos del pescado deben tener vida...de lo contrario es viejo o está ya feo...Y ahí si, me mato...imaginate...acostumbrado toda la vida a comer y caminar entre vacas...como diablos me voy a poner a oler pescado en una pescadería...o a mirarlos a los ojos para ver si estos tienen vida o no...si lo hago en Uruguay llamán para que me internen por loco...y solo atine a decirle que si...y dejarla correr...
Catía, que así se llamaba mi pasajera, diminutivo de CATARINA..., se reía y me contaba que había conocido otros uruguayos..., y que sabía lo fanáticos que nosotros eramos por la carne vacuna...Entonces, para reafirmar lo dicho anteriormente, me dijo: mire, ese tema del pescado y la vida en los ojos, es como cuando Ud. ve a una mujer a los ojos, y la ve féliz...es igual. Eso no se puede mentir...todo lo demás, si..., pero si es féliz o no, Ud lo ve en su mirada...y le aseguro que no se equivoca...Dicho esto Catia se bajo y yo segui con mi merluza y con las palabras de doña Catia dando vueltas en la cabeza...
El resto es anécdotico...por supuesto que comi mi merluza..., y aquella frase de mi abuela: ¨los ojos son el espejo del alma¨..., repentinamente comenzo a darme vueltas junto con las de doña Catia...y comenze a detenerme en ojos y miradas...los hay más lindos y los hay más feos..., pero, hay un montón inmenso de ojos tristes dando vuelta por ahí...Quizás fue por eso, que aquel 3 de Junio, a la noche, cuando nos encontramos en Guarulhos, San Pablo y me preguntaste porque me reía..., era porque al ver tu mirada, recorde a Doña Catia y la historia de los ojos y los peces...
El tiempo paso..., ya van más de dos años, y verte féliz es un vicio...es lo único que le pone algo de sentido y gracia a muchas noches separados...verte con esa mirada radiante que siempre tenes, optimista y positiva y dandole para adelante sin importar lo grave de la situación...Contigo aprendí eso...que aquella frase que decía mi abuela y que de alguna manera Doña Catia repetía: ¨los ojos son el espejo del alma...¨, era cierta...y los años pasan para todos..., envejecemos..., pero estoy seguro que esa mirada va a seguir estando ahi...como desde Guarulhos, hace ya más de dos años...no ha cambiado nada...beso, que tengas un gran pero gran día...